Una vez más, las lesiones se hicieron protagonistas en un partido de los Seattle Seahawks esta temporada. En esta ocasión, la dolencia de rodilla sufrida por Matt Hasselbeck en Nueva York, el domingo pasado ante los Giants, evitó que el quarterback titular pudiera jugar frente a los Green Bay Packers y Seattle acabó perdiendo su cuarto encuentro de la campaña, 27-17, ante los 68,302 fieles aficionados que se desplazaron al Qwest Field.
Seneca Wallace, también renqueante de la lesión muscular que sufriera hace unas semanas, se limitó a hacer labores de segundo quarterback, con lo que Charlie Frye tomó la alternativa como pasador titular. La aventura funcionó bastante bien en la primera mitad. Seattle controló la pelota gracias a una buena participación del corredor Julius Jones, quien acabó el choque con 44 yardas terrestres (38 en la primera parte), y hasta se puso por delante en el marcador, 10-3, después de que un golpe de Julian Peterson forzará un fumble que fue recuperado por Rocky Bernard. Siete acciones más tarde y tras tres carreras, una recepción y 17 yardas totales de un Maurice Morris que se vio rápido en su vuelta a los terrenos de juego, Frye encontró al tight end novato John Carlson, para que éste atrapara su primer pase de touchdown en la NFL, mediante una recepción de 6 yardas.
El último avance de Green Bay en el segundo cuarto comenzó a cambiar el curso del partido. A pesar de jugar con una separación de hombro, el quarterback Aaron Rodgers culminó un drive de 13 acciones y más de siete minutos con una carrera de 1 yarda que permitió a los Packers irse al descanso con el marcador empatado a 10.
La segunda parte fue dominada claramente por el cuadro visitante. Sin embargo, las cosas pudieron ser diferentes si, en el primer avance de los Seahawks, cuando el tanteador todavía estaba igualado, una escapada de 51 yardas protagonizada por Jones no hubiera sido anulada por un rigurosa falta, holding, señalada al guardia izquierdo Mike Wahle.
La defensa de los Seahawks respondió en los dos primeros avances visitantes de la segunda mitad. Pero como el ataque de Seattle no pudo lograr un solo primer down en sus dos primeras posesiones, la retaguardia acabó cediendo en la tercera oportunidad de Green Bay.
Los Packers anotaron un touchdown que los puso por delante 17-10 y, a partir de ese momento, todo fue cuesta abajo para Green Bay. La anotación llegó en un kilométrico envío de 45 yardas de Rodgers al líder de la NFL en yardas de recepción, Greg Jennings. Rodgers culminó el envite con 208 yardas de pase, dos touchdowns y ninguna intercepción, números muy superiores a los de Frye, quien lanzó para 83 yardas, dos anotaciones y dos intercepciones. Jennings lideró a los Packers con 84 yardas de recepción, mientras Koren Robinson sumó sólo 23, para encabezar a los Seahawks. Ryan Grant añadió 90 yardas en 33 carreras para los Packers. El dominio de Green Bay fue total. Los Packers sumaron 20 primeros downs por 13 de los Seahawks y totalizaron 313 yardas por 177 de los locales.
Rodgers encontró al fullback John Kuhn en su segundo lanzamiento de anotación (1 yarda), a principios del último cuarto. Con esta acción el partido quedó prácticamente decidido y terminó de ser sentenciado con las dos intercepciones sufridas por Frye, a manos de Charles Woodson y Tramon Williams. La primera dejó la mesa puesta para el segundo field goal de Mason Crosby, desde 51 yardas. El kicker de segundo año no fue el único en conectar desde una distancia tan lejana, ya que Olindo Mare, que continuó con una marca perfecta en la temporada (10 de 10 field goals), lo había hecho para los Seahawks desde 50, para igualar el partido a 3 puntos en los albores del segundo periodo.
Con las cosas decididas, Frye conectó con Keary Colbert (5 yardas), en un lanzamiento de anotación que sirvió para maquillar el resultado cerca del final. En el avance, el quarterback local realizó una acción individual de 27 yardas. Lofa Tatupu lideró, con 11 derribos, a una defensa que jugó con intensidad, pero acabó sucumbiendo al tener que estar durante 37 minutos y 26 segundos en el terreno de juego.
La derrota complicó mucho las cosas a los Seahawks en su división ya que, sumada al triunfo de los Cardinals sobre los Cowboys, dejó a Seattle a dos partidos y medio de Arizona. La próxima semana, los pupilos de Mike Holmgren viajarán a Tampa Bay para enfrentarse a los Buccaneers, mientras que Arizona disfrutará de su jornada de descanso.